El Queso Curado de Aracena es efectivamente el arte culinario

Un queso español maduro destacado en una fuente de madera rústica

El queso curado de Aracena es un producto artesanal que ha sido reconocido como parte importante de la gastronomía española. La región de Huelva, en la que se elabora este delicioso queso, cuenta con una tradición culinaria rica y diversas para ofrecer a los amantes de la comida gourmet. Esto está claro desde el momento en que saben su existencia e interesan en su sabor peculiar, tan complejo como intenso.

El proceso por el qual va curando este queso hasta convertirse en una delicadeza culinaria apabullante resulta bastante especial y único. A partir de la elección cuidadosa de materias primas, a saber, la leche cruda procedente de cabras y ovejas que pastan en el interior de Andalucía, y su curación en condiciones muy determinadas durante varios meses hasta casi un año, se consigue ese resultado singular. La textura firme más bien dura se combina magníficamente con los sabores que el propio proceso de maduración le aporta.

La laboriosa tarea de elaborar este delicioso queso y la riqueza culinaria que contiene la explican por sí solas al igual que su categorización como arte culinario. Si bien parece una consideración un poco exagerada, se trata sencillamente de otro modo de nombrar lo que en definitiva constituye arte. Así que si tienes interés por probarlo una vez más, estarás sumando algo nuevo a tus habilidades gastronómicas.

Índice
  1. Historia y tradición
  2. El proceso de elaboración
  3. Elaborado a mano
  4. Artesanal pero moderna
  5. La relación entre el queso y la cultura de una región

Historia y tradición

En un salón antiguo y rural con una mesa de madera tallada a mano se encuentran platos de queso curados, papeles amarillentos y un molde de queso de cobre abandonado

La región de Huelva cuenta con una larga historia de elaboración del queso, lo que se inició mucho tiempo atrás por la necesidad de conservar productos alimenticios frescos para después de la recogida de las cosechas. En efecto fue el primer queso curado a nivel nacional que conocí, algo que me resultaba nuevo. En mis tiempos era prácticamente desconocido fuera de Andalucía.

La dedicación y los conocimientos transmitidos con generosidad a las nuevas generaciones fueron creando la famosa tradición culinaria que hoy podemos apreciar y disfrutar del queso en sus diferentes variedades, cada cual con su perfil peculiar por tratarse de lecha procedente de distintas criaturas: cabras y vacas principalmente, pero últimamente ovejas también.

De esta manera, sin embargo ha llegado a conocimiento de personas que se sienten especialmente aficionados a la degustación de estos deliciosos productos, los cuales no son sino una manifestación más de la riqueza culinaria. Por lo tanto, las condiciones para su consumo en el extranjero también mejoran día tras día.

El proceso de elaboración

En un granero de piedra, una mesa desgastada por generaciones de queseros se ubica en el centro, rodeada de tinas de queso Aracena madurado con manchas de moho y iluminadas por la luz levemente aclarada que entra a través de las ventanas

El curado del queso Aracena que lleva tantas horas entre sus curadoras se inicia con la elección cuidadosa de materias primas y sigue como todo proceso con cada una de las fases importantes. La leche cruda utilizada para su preparación es extraída por las mujeres de estas criaturas a los alrededores del castillo de Aracena, siendo recolectada en bidones hasta llegar finalmente a un lugar adecuado y seguro.

La primera fase culmina cuando el líquido que han producido estas cabras se convierte directamente en queso, sin ser previamente coagulado. Como mencionaba al principio, esto es algo típico del queso Aracena.

En efecto la conservación de productos frescos fue una necesidad abrumadora para las personas que comenzaron esta elaboración de quesos. Y como se sabe bien, la cura del producto se vuelve una condición básica para poder mantenerlo con el tiempo y consumirlo más tarde.

Elaborado a mano

Un queso español Queso Curado de Aracena se muestra en una tabla de madera con luz cálida y sombras suaves

Este producto artesanal de la tierra andaluza es un reflejo directo de la labor cuidadosa de muchas personas que, día tras día, se comprometen en realizar las acciones necesarias para obtener este precioso queso. Es fácil de reconocer y delicioso al gusto; sus distintos momentos o fases nos ayudan mucho a apreciar esta deliciosa producción culinaria artesanal.

La dedicación constante que requiere cada uno de los pasos importantes en el proceso de elaboración resulta algo realmente satisfactorio, ya que permite obtener un resultado magnífico y único al final. Está claro que es una labor apasionante y, por lo tanto, merecedora del título de arte culinario.

Al respecto de esto no podrías estar más en lo cierto con un simple razonamiento que el propio proceso de elaboración del queso curado Aracena tiene unos procesos de elaboración artesanal muy largos que se prolongan varios meses y alcanzan incluso hasta poco más de un año y medio. Todo este tiempo es esfuerzo para mantener las condiciones óptimas, a modo de conservar la calidad de lo obtenido hasta ese momento y poder obtener el resultado final perfecto.

Artesanal pero moderna

Las técnicas utilizadas en el elaboración del queso artesanal son de carácter tradicional, por eso se ha mantenido así desde sus inicios. Con todo lo anterior no es posible confundirlas con la industria que puede ser igual de eficiente y productiva a su vez pero sin perder aquel encanto añejo.

Las distintas variedades de este producto artesanal están muy bien conservadas para poder probarlo en cualquier momento y tiempo, debido a los pasos cuidadosamente realizados durante toda la elaboración del queso. Esta es la razón principal que debernos admirar esta creación tan exquisita.

La experiencia y dedicación manifiestas al realizar cada una de las etapas clave permiten llegar al resultado final muy satisfactorio. Por esa misma relación causa-efecto, sin duda alguna este puede ser considerado el arte culinario por excelencia.

Pero la pregunta que queríamos hacer en nuestro artículo no tenía respuesta clara. Y aunque podías decir con seguridad que las técnicas tradicionales han quedado muy bien reflejadas en este producto y su éxito como todo el mundo sabe es evidente, podemos responder a nuestra pregunta que tenemos entre paréntesis: “¿El Queso Curado de Aracena es efectivamente el arte culinario?”. Entonces si te gustas la respuesta sería un rotundo sì. En primer lugar debemos tener una visión clara sobre lo qué representa este tipo de quesos y también cómo fue obtenido. Pero una vez que ya tenemos los términos en nuestra mente, no dudamos en ofrecer nuestro veredicto de triunfo al productor y también a las personas aficionadas a degustar estos productos culinarios tan exquisitos como deliciosos.

La relación entre el queso y la cultura de una región

Pensando mucho es posible determinar que existe en realidad una gran diferencia entre aquellos platos reconocidos por ser deliciáossimo hasta la saciedad, lo cual está claro, o aquellas comidas no tan famosas a pesar de que también son muy buenos. Por ejemplo los platillos más populares y sabrosos como el pa amb tomàquet catalán, las paellas valencianas, los chuchos y tortilla castellanas solo pueden mencionarte que ya con la llegada del verano comienzamos a consumir muchos los quesos tipo de queso fresco; sin embargo hay una gran diferencia entre aquellos. Mientras por un lado estas platillos son fáciles de encontrar, no lo es este último.

Con lo anterior también queda claro que el tiempo transcurrido y las mejoras tecnológicas han permitido hacerlo posible consumir estos productos culinarios hasta la saciedad para cualquiera de los seres humanos.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a El Queso Curado de Aracena es efectivamente el arte culinario puedes visitar la categoría Gastronomía.

Relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Tu puntuación: Útil

Subir